El domingo 20 de octubre de 2013 miles de recreacionistas de
toda Europa se reunieron en Leipzig para revivir de modo incruento la
"Batalla de las Naciones" al cabo de la cual, los emperadores de
Austria y Rusia junto al Rey de Prusia, derrotaron al emperador francés hace
200 años.
Según el alemán Michel Kothe, miembro de la Asociación "Batalla de
las Naciones" que organizó el evento, la reconstrucción del domingo ha
querido hacer hincapié sobre todo en la "reconciliación" de los
pueblos. “Contrariamente a lo que ocurrió en la época, los representantes de 28
países acamparán pacíficamente antes de la batalla" declaró.
Una estrella de la reconstitución fue Frank Samson, un abogado parisino
de 46 años, quien suele ponerse el uniforme del emperador desde 2005. Según él,
su uniforme de Napoleón cuesta entre 1.000 y 1.500 euros, pero el de un
mariscal cuesta cerca de 10.000 euros. Al igual que Frank Samson, que se lleva
a su esposa y a sus dos hijos a casi todas sus aventuras napoleónicas, muchos recreacionistas
han convencido a sus familias para que participen en el espectáculo. Para
mejorar su papel, Samson aprende desde hace un año y medio el corso, la lengua
materna de Napoleón.
La victoria de Leipzig en 1813 puso fin al dominio napoleónico sobre los Estados alemanes y tuvo una enorme repercusión en Alemania. "Fue un poderoso mito nacional", reconoce el alemán Martin Schulz, presidente del Parlamento Europeo. Después de Leipzig, Alemania, constituida durante siglos por una multitud de pequeños estados, prosiguió su camino hacia la unificación, concluida bajo dominio prusiano, con la proclamación del Imperio Alemán, al término de otra derrota de Francia tras la Guerra Franco-Prusiana de 1870.
Hubo muchas conferencias y discursos en favor de la paz y de la unidad
de los pueblos de Europa como corresponde y es de desear. Parece que hubo
también algún que otro servicio religioso pero sorprendentemente, o no tanto,
no hay noticias de homenajes por parte de las Fuerzas Armadas de los países
intervinientes a sus camaradas caídos.
“Mas todos aquellos varones e incluso también los hijos libres de
tribus bárbaras eran personas nobles que ofrecían sus pechos al acero para
defender su Patria; con cada uno de ellos hubiéramos podido brindar con nuestro
vaso en un banquete, como se brinda como hermanos. Los valientes de la Tierra
son los que en el combate fijan los límites de la libertad…”
Ernst Jünger- Sobre los acantilados de mármol
Ernst Jünger- Sobre los acantilados de mármol
Fuentes:
-La Voz de Rusia
-El Universal de Caracas
De belles images, la reconstitution semble d'une grande qualité!
ResponderEliminarSalutations,
Phil.