Este año los juegos del verano en mi casa, no transcurrieron como yo esperaba. No obstante deseo destacar un juego improvisado de Primera
Guerra que tuvo lugar el sábado 19 de enero. Participamos Esteban Puente y yo,
luego vino de visita Daniel González que estuvo un buen rato haciéndonos
compañía.
No obstante, los
alemanes desconocían la situación y sus órdenes eran tomar el reducto y se
empeñaban en eso. Por su parte los británicos, aun sin el apoyo que les
brindaban los grandes obuses, decidieron resistir.
Fue un escenario ambientado durante una de las ofensivas
alemanas posteriores a marzo de 1918. Se había producido la ruptura y los alemanes estaban llegando
a las posiciones de la artillería pasada británica.
Se sortearon los bandos y el alemán debió sortear por que
flanco ingresaría una buena parte de su fuerza.
Los británicos debían defender el reducto y tenían la orden
de no perder la batería de obuses de 8” .
Los alemanes tenían dos posibilidades: tomar el reducto o penetrar hacia la
retaguardia sobrepasando las posiciones británicas.
Fuerzas alemanas
Fuerzas británicas
El juego comenzó con un combate aéreo entre los Hannover CL
III y los ágiles SE5a, los primeros, numéricamente superiores, lograron limpiar el cielo de
enemigos y comenzaron sus ataques a las posiciones inglesas.
Hannover CL III |
SE5a |
El alemán recibió finalmente órdenes de tomar el reducto y
la fuerza ingresaba por el flanco derecho
¡justo frente al reducto! Parecía buena suerte…
La artillería alemana rompió el fuego, una de la baterías bombardeó el pueblo, ya en ruinas y
la otra buscaba las posiciones de la artillería británica que empezó un fuego
de contrabatería que rápidamente se fue ajustando.
El alemán no lo sabía pero el fuego de su artillería luego
de media hora (final del segundo período) ya había producido la retirada de una
de las compañías enemigas.
Mientras tanto por el frente el grueso de la infantería
alemana apoyada por algunos A7V y Beutepanzer Mk IV avanzaba hacia las
posiciones enemigas.
Por el flanco derecho tres compañía de Pioneros con entrenamiento
de Sturmtruppen y sostenidos por
morteros y ametralladoras pesadas se lanzaban al asalto del reducto para lo cual debían atravesar una última
línea de alambradas.
El eficacísimo fuego de la infantería británica puso a una
de las compañías de pioneros en cuerpo a tierra y de allí ya no pudieron
moverse. La sección de morteros pesados y las ametralladoras se desplegaron e
iniciaron el fuego con la esperanza de hacer bajar la cabeza a los ingleses que
tozudamente seguían haciendo fuego.
Un intento de asalto a las trincheras de una de las
compañías alemanas terminó en su aniquilamiento ya que sufrió inclusive fuego
propio al llegar a las posiciones enemigas.
La artillería de ambos bandos rugía buscándose mutuamente
para destruirse. Mientras los Hannover, dueños del cielo, ametrallaban las
posiciones de los ingleses.
Sin embargo el ataque de los
pioneros estaba detenido y el avance de dos de los batallones del 58º de Infantería todavía tenía que
atravesar toda la tierra de nadie.
Mientras avanzaban los tanques
del Kaiser aparecieron por detrás del pueblo y a ambos lados del camino dos
secciones de Tanques MkIV que rápidamente se dispusieron a apoyar con sus
fuegos la defensa de las posiciones de los obuses de 8” .
De pronto se produjo un estremecimiento en
el HQ británico, llegó un parte informando que una ronda de la artillería alemana había logrado un blanco directo sobre los obuses de 8” y los había destruido. Ya no era
posible cumplir las órdenes impartidas por el Comando de la División.
La artillería alemana estaba a
punto de cesar sus fuegos en apoyo a este ataque pues se la necesitaba
desesperadamente en otro sector del campo de batalla y los infantes solo
contarían entonces con sus armas de apoyo y los tanques para llevar adelante el ataque.
Para ese momento los ingleses,
que recibían el apoyo de sus tanques, habían sufrido menos pérdidas que los
alemanes y se consideró que no sería posible tomar el reducto.
El combate quedó indeciso, ya que el resultado fue desfavorable para ambas partes, pues ninguno de los dos bandos
pudo alcanzar a cumplir sus órdenes.
Nos pareció un lindo
escenario, interesante y para repetir con una mayor elaboración. La pasamos muy
bien ¡gracias muchachos!
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